La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), advirtió este lunes (16) acerca de los riesgos que acarrea el uso de las criptomonedas que carecen de regulación y control por alguna entidad financiera, tanto a nivel nacional como internacional.
Las criptomonedas como el bitcoin nacieron con una finalidad, no poseer intermediarios. El hecho de que sea una moneda descentralizada —no depende de un gobierno o banco central— es lo que llama la atención de sus inversionistas.
En ese sentido, el artículo de la UNAM señala que las criptomonedas se han utilizado como medio de pago para “evitar la fiscalización”. La otra cara de la moneda apunta a que muchos intentan huir de los pésimos servicios intermediarios hacia soluciones eficaces como el bitcoin.
Riesgos asociados a Bitcoin
Pese a que el precio de bitcoin esté basado en su oferta y demanda, considerando que la oferta es limitada (solo existirán 21 millones de monedas), la institución educativa considera que estos precios se forman sin ninguna fundamentación pública conocida.
Además, resalta que hasta el momento, el mercado de criptomonedas no cuenta con “un sistema exitoso” que evite su uso. Es decir, los entes regulatorios no han podido elaborar un régimen que prohíba la utilización de estos activos digitales.
Por otro lado, Norman Wolf, académico de la Facultad de Contaduría y Administración de la UNAM, explicó sobre los riesgos asociados al uso de las criptomonedas. Una de las desventajas que señala es la falta de conocimiento del origen de los recursos que facilitaron su compra. Es por ello, que se vuelven propensas a emplearse en operaciones ilícitas.
“Una gran cantidad de recursos de procedencia ilícita encuentra un nicho seguro en las criptomonedas para quedar blanqueada. Incluso, estas pueden ser usadas para financiar el terrorismo, pues se transfieren de un país a otro con suma facilidad”.
No obstante, un informe reciente de Chainalysis, revela que apenas el 0,24% de todo el volumen transado con criptomonedas en 2022 estuvo asociado con actividades ilícitas.
UNAM advierte a los inversionistas
Continuando, Wolf asegura que a diferencia del método de pago tradicional, como bancarias, las transacciones de criptomonedas no pueden ser rastreadas, abriendo camino a crímenes como lavado de dinero.
“Como no todas las personas entienden la complejidad del proceso matemático a partir del cual se generan las criptomonedas, ni saben qué factores influyen en su oferta y demanda, tampoco están en condiciones de prever los riesgos que supone hacer transacciones con ellas”, concluyó el experto de la UNAM.
Si bien existen artimañas para que éstas sean totalmente anónimas, principalmente con bitcoin, la mayoría de las personas en general recurren a plataformas centralizadas que están sujetas al KYC (Conoce a tu cliente), estipulados por los propios gobiernos.
De esta manera, los usuarios están expuestos frente a cualquier petición autoritaria a la empresa intermediaria sobre informaciones personales y bancarias, caso se requiera necesario.
